Malcolm Lowry – Fatal y entrañable
26 de agosto de 2025
Tennessee Williams – En el teatro del deseo
3 de septiembre de 2025
Malcolm Lowry – Fatal y entrañable
26 de agosto de 2025
Tennessee Williams – En el teatro del deseo
3 de septiembre de 2025
Mostrar todo

En el país de los desparecidos

Enrique Laviada Cirerol –

Mientras los reflectores se dirigían al espectáculo protagonizado en el Senado por farsantes cuyos sainetes y miseria moral degradan la práctica parlamentaria, nos enteramos del asesinato de una madre buscadora, su nombre, Aida Karina Juárez Jacobo, entregada en cuerpo y alma a localizar a su hija, desaparecida en el estado de Zacatecas.

Una historia de horror en medio del horror, se podría decir, la de una mujer sacrificada presuntamente a tiros, cuando regresaba de una de esas jornadas de búsqueda, que realizan los familiares solos, dejados a su propia mala suerte, abandonados en el sentido más desgarrador de la palabra.

El caso de Aida Karina se ha visto, además, complicado por las mentiras y enredos de las autoridades, dedicadas más a cuidar la imagen (bastante por los suelos) del gobernador, David Monreal, que a cumplir con su responsabilidad y hacer su trabajo.

Como suele suceder, pues, se limitaron a confirmar su negligencia y su estulticia.

El gobierno de Zacatecas hizo correr la versión, al estilo ligero de su vocero (léase Rodrigo Reyes, otro farsante), al respecto de que existía una estrecha colaboración entre su fiscalía y la de San Luis Potosí, entidad vecina en donde fue encontrado el cuerpo sin vida de la madre buscadora, además de que los presuntos responsables ya habrían sido identificados y rápidamente detenidos.

…………………………………………..

Esa información, sin embargo, fue desmentida de inmediato por las autoridades potosinas, quienes señalaron que no existía colaboración para resolver el caso, que no estaban enteradas de que existiera alguna detención, ni que se hubiese establecido convenio alguno para atender casos de tal naturaleza.

Resulta importante recordar que, Aida Karina, se unió a los colectivos de búsqueda, luego de la desaparición de su hija Goretty Juárez, a finales de junio pasado, quien fue vista por última vez en el municipio de Guadalupe en Zacatecas, un estado donde su gobernador presume con inusitada frecuencia los avances en materia de pacificación, al punto de convertirse, según dice, en uno de los estados más seguros (¿?) del país.

Por cierto, un país en el que, según cifras dadas a conocer por Amnistía Internacional, se han registrado más de 30 asesinatos de familiares de personas desparecidas hasta mayo de 2025. Un país donde no cesa de crecer el número desaparecidos que según cifras oficiales podría llegar a mas de 130 mil personas. Un país donde se calcula que 14 personas desaparecen cada día en medio de la más terrible impunidad. Un país donde esa desgracia se extiende como una mancha a 2 500 municipios, es decir, que cubre el 75% del territorio.

………………………………..

Los rostros de esas miles de personas desaparecidas se pueden ver por todas partes, pegados en postes, puentes y muros o portados por sus familiares en marchas de protesta por una realidad dolorosa que, lejos de resolverse, se agudiza, y contradice a gobiernos morenistas como el de Zacatecas, y el que encabeza uno de sus extraños aliados (o cualquier cosa que sea), como el  “Verde” de San Luis Potosí, en donde la búsqueda de personas desaparecidas se ha convertido en una actividad de alto riesgo y sus autoridades no garantizan la protección de los familiares, prevalece la impunidad y un oprobioso desorden.

Hasta el momento en el que escribo esta columna, no existe una versión seria acerca de lo sucedido con el trágico final de la madre buscadora, Aida Karina, que perdió la vida en el intento de encontrar a su hija Goretty, de quien tampoco hay rastro de su paradero, en otro caso que se suma a los miles que se repiten sin remedio.

Mientras tanto, los farsantes se empujan y se agolpan, sin mostrar vergüenza.

En el país de los desaparecidos.

Acertijo

La presidencia no preside ni con e ni con a ni con nada.